Tener un buen olor ambiental es una necesidad para la mayoría de los espacios, desde Campings, restaurantes y hoteles hasta hospitales y centros de trabajo. Muchas sustancias que generan malos olores se originan en materia orgánica en descomposición. Estas sustancias pueden ser difíciles de eliminar, especialmente en entornos confirmados o espacios donde los factores ambientales no se controlan. Afortunadamente, existen bacterias ácido lácticas que son capaces de reducir o eliminar estos olores.
Las bacterias empleadas son microorganismos que producen ácidos lácticos durante la fermentación de la materia orgánica. Estos microorganismos son inocuos para los seres humanos y cuando se agregan a entornos específicos, las bacterias ácido lácticas pueden controlar los olores desagradables. Estos microorganismos se pueden aplicar a los sistemas de tratamiento para reducir los olores. Estas bacterias también ayudan a reducir la acumulación de residuos orgánicos, como lodos y grasas, en áreas que se desaguan con frecuencia.
Existen algunos olores procedentes de materia orgánica que se pueden reducir o eliminar con el uso de bacterias ácidos lácticas. Estos olores incluyen los siguientes:
1. Olores a materia orgánica en descomposición: Estos olores generalmente se producen cuando la materia orgánica comienza a descomponerse como en Destríos Agroindustriales, Alcantarillas, Contenedores o Camiones. Igualmente es efectivo en derivas de algas y otras materias orgánicas a la costa. Estos olores se pueden reducir o eliminar al agregar bacterias a los sistemas de tratamiento.
2. Olores a hidrocarburos: estos olores se producen cuando los hidrocarburos se descomponen. Estos olores a menudo se encuentran en los espacios donde se generan grandes cantidades de residuos orgánicos, como plantas de tratamiento de aguas residuales.
3. Olores a sustancias volátiles: Estos olores suelen provenir de compuestos aromáticos volátiles, como los compuestos aromáticos policíclicos. Estos compuestos aromáticos se producen naturalmente como resultado de la descomposición de los residuos orgánicos y también pueden encontrarse en sustancias químicas industriales.
4. Olores a metales pesados: Estos olores se producen cuando algunos metales pesados se descomponen. Estos compuestos se encuentran comúnmente en productos químicos industriales, como los aceites y otros compuestos petroquímicos.
5. Olor a amoníaco: El amoníaco es un compuesto químico orgánico que se produce naturalmente como resultado de la descomposición de los residuos orgánicos y puede ser una fuente significativa de malos olores. El uso de bacterias benéficas puede ayudar a reducir la cantidad de amoníaco en el aire.
6. Olores a sulfuro de hidrógeno: Estos olores se producen cuando el sulfuro de hidrógeno se descompone. Estos compuestos se encuentran comúnmente en entornos donde el agua residual se recircula en grandes cantidades.
7. Olores a alquitrán: Estos olores se producen cuando los compuestos de alquitrán se descomponen. Estos compuestos se encuentran comúnmente en el aire en áreas donde se queman combustibles fósiles, como la producción de energía.
8. Olores a gas natural y gasolina: Estos olores provienen de los compuestos que se encuentran en el gas natural y la gasolina. Estos compuestos pueden ser una fuente significativa de malos olores en espacios cerrados.
9. Olores a caca de perro: Estos olores se originan en los residuos orgánicos de los perros. Estos olores se pueden reducir o eliminar al agregar bacterias ácidos lácticas a los sistemas de tratamiento.
10. Olores a plantas y hojas: Estos olores provienen de la descomposición de material orgánico, como plantas y hojas. Estos olores se pueden controlar al agregar bacterias ácidos lácticas a los sistemas de tratamiento.
En general, las bacterias ácido lácticas son una herramienta útil para controlar los olores desagradables en ambientes donde hay materia orgánica en descomposición. Estos microorganismos se pueden aplicar en los sistemas de tratamiento para reducir la cantidad de olores desagradables. Estas bacterias también ayudan a reducir la acumulación de lodos y grasas en áreas donde el agua residual se recircula con frecuencia.
Es importante señalar que las bacterias no pueden eliminar siempre completamente los olores desagradables. En cambio, los microorganismos se utilizan para ayudar a reducir la cantidad de olores desagradables en un espacio. Si bien es posible reducir los olores desagradables con el uso de bacterias ácido lácticas, los usuarios deben tener en cuenta que los microorganismos no eliminarán por completo los olores desagradables.
En conclusión, las bacterias son una herramienta útil para controlar los olores procedentes de materia orgánica en descomposición. Estos microorganismos se pueden aplicar a los sistemas de tratamiento para reducir la cantidad de olores desagradables. Estas bacterias ácido lácticas también ayudan a reducir la acumulación de lodos y grasas en áreas donde el agua residual se recircula con frecuencia. Específicamente, las bacterias ácido lácticas pueden ayudar a reducir o eliminar los olores a materia orgánica en descomposición, hidrocarburos, sustancias volátiles, metales pesados, amoníaco, sulfuro de hidrógeno, alquitrán, gas natural y gasolina, cacas de perros y plantas y hojas. Aunque estas bacterias son útiles para controlar los olores, se debe tener en cuenta que no eliminarán completamente estos olores.